Tipos de humidificadores

Tipos de humidificadores

Los humidificadores son una herramienta fundamental para equilibrar la humedad en los hogares y oficinas. A continuación te contamos los diferentes tipos de humidificadores que existen reseñando sus características principales para que puedas valorar cuál es el que mejor se adapta a lo que estás buscando.

Humidificadores ultrasónicos

En primer lugar encontramos los humidificadores ultrasónicos, se trata de un tipo de humidificadores de vapor frío (en los que profundizaremos a continuación), que tienen un funcionamiento un poco especial ya que para crear el vapor se basan en movimientos ultrasónicos que hacen que el agua vibre hasta romper todas sus moléculas. De esta manera, este tipo de humidificadores generan un vapor mucho más fino y sencillo de respirar. Como se trata de humidificadores de vapor frío funcionan utilizando agua embotellada o destilada.

Entre sus principales ventajas los expertos destacan que se trata de un tipo de humificadores muy efectivos que consumen muy poca electricidad para su funcionamiento. De esta forma, como además generan vapor frío, no habrá problemas de seguridad con ellos y no cambiarán la temperatura del ambiente como sí sucede con otros humidificadores de vapor caliente. Además, los humidificadores ultrasónicos son especialmente silenciosos porque no tienen extractores, con lo que son la mejor alternativa para ubicar en habitaciones o en espacios de trabajo en los que el silencio sea importante. Como notas negativas cabe reseñar que funcionan con agua embotellada y que su precio es algo más elevado, aunque en poco tiempo se amortiza, porque rinden mucho mejor.

Humidificadores de vapor frío

Por otro lado encontramos los humidificadores de vapor frío comunes. Estos humidificadores también funcionan cogiendo el aire de la habitación en la que se les ubica, pasándolo por la zona en la que se ubica el agua y volviéndolo a extraer para aumentar la humedad en el ambiente, pero la diferencia con los ultrasónicos es que para crear el vapor estos humidificadores no se basan en movimientos ultrasónicos así que, aunque su vapor es más fino que el de los humidificadores calientes, lo es menos que el de los dispositivos ultrasónicos. De todas formas su aire resulta mucho más sencillo de respirar que el de los humidificadores de vapor caliente.

Funcionan también con agua embotellada o destilada, porque el dispositivo no llega a llevar el agua al punto de ebullición, con lo que al no matar los patógenos que pueda contener el líquido es importante escoger agua previamente tratada.

Entre sus puntos negativos encontramos el uso del agua embotellada y que su mantenimiento es alto más complicado porque habrá que ir limpiando de forma regular el filtro por el que pasa el agua y sustituirlo cada cierto tiempo. Asimismo, son unos humidificadores que como funcionan con el extractor son probablemente los más ruidosos de todos los modelos que existen. Los expertos los recomiendan para las personas que tienen problemas como enfermedades de garganta, catarros o faringitis.

Humidificadores de vapor caliente

Por último encontramos los humidificadores de vapor caliente. Se trata de un tipo de humidificadores que funcionan de forma similar a cuando poner a hervir agua. Estos humidificadores calientan el agua hasta que ésta se evapora. Para conseguir este resultado funcionan con resistencias eléctricas, que llevarán al agua a su punto de ebullición. De esta manera, el vapor sale caliente desde el humidificador, con lo que en estos casos es importante tener mucho cuidado con los niños o con la manipulación de estos dispositivos porque en caso contrario podríamos tener un fuerte riesgo de quemadura si nuestra piel entrase en contacto directo con el vapor en algún momento.

Entre las ventajas principales de los humidificadores de vapor caliente encontramos que normalmente son mucho más pequeños por la forma en la que trabajan, con lo que es más sencillo ubicarlos en cualquier espacio. Además con estos humidificadores sí es posible usar agua del grifo sin que esto suponga ningún riesgo porque al calentarse el agua hasta el punto de ebullición no desprenderán al ambiente ningún tipo de germen ni de agente patógeno que pudiera ubicarse en el agua del grifo. Asimismo, los humidificadores de vapor caliente son también una gran alternativa para muchos usuarios porque son los más baratos que puedes encontrar en el mercado.

Como principales notas negativas cabe reseñar que si no tenemos cuidado con su manipulación pueden llegar a producirnos quemaduras, ya que llegan a alcanzar temperaturas muy altas. Además estos humidificadores también pueden llegar a aumentar la temperatura de la habitación en la que nos encontremos, cuando en muchos casos sólo estemos tratando de mejorar cantidad de humedad en el ambiente.

Como funcionan con resistencias el gasto energético de los humidificadores es también más alto, y por tanto gastarán mucha más electricidad que otros humidificadores, pudiendo en algunos casos incluso volverse bastante ruidosos. Los profesionales recomiendan estos humidificadores para los niños, ya que el vapor que crean es más pequeños, aunque siempre bajo supervisión adulta y teniendo mucho cuidado con sus altas temperaturas.